Bio

Destacado pintor larense, considerado por los críticos del arte como uno de los mejores acuarelistas de Venezuela; nació en Humocaro Alto, pueblo del municipio Morán del estado Lara, el 9 de enero de 1915; hijo de Trinidad Orozco y María Antonia Sánchez. Cursó sus estudios de primaria en su pueblo natal y, al igual que su hermano José Rafael Orozco estaría destinado a cursar estudios de sacerdocio en el Seminario Divina Pastora de Barquisimeto, donde permaneció sólo cuatro años sin haber logrado el objetivo propuesto, ya que su inclinación por la pintura lo llevó a retirarse de ese centro, contrariando los deseos familiares.

Viaja a Caracas en 1.930, y cursa estudios en la Escuela de Artes Plásticas en horario nocturno, pues en el día debía trabajar para sufragar sus gastos; allí estudia la figura humana, el desnudo, el bodegón, la composición; tiene como maestros a Rafael Monasterios, Marcos Castillo, Cruz Álvarez Sales. En 1.931 realiza su primer cuadro de carácter religioso titulado “El Bautizo de Jesús”, perteneciente hoy a la Iglesia de Humocaro Alto.

En el año 1.932 viaja a Valencia, donde consigue un ambiente intelectual propicio para seguir pintando, hace amistad con: Felipe Herrera Vial, Luis Augusto Nuñez, Braulio Salazar, Leopoldo La Madriz, Castor Vasquez, Luis Ramón Cerro y otros. Se inicia en el arte de la acuarela, pinta una serie de paisajes valencianos de visión impresionista.

A partir de 1.934 expone sus trabajos en Caracas, Valencia, Acarigua, siendo su primera exposición en Barquisimeto en el año 1.935, la cual es reseñada en El Impulso así: “La primera exposición del joven pintor Trino Orozco, en el Centro Social… auspiciada por el Ateneo de Barquisimeto…” ( El Impulso, 29 de noviembre de 1.935, Nº 10.281, p. 4). La misma fue comentada por Lino Iribarren Celis, Antonio Castellanos, Gustavo Eloy Machado y Luis Matute Heredia, en la prensa local.

Su obra es meritoria de valiosos comentarios en el mundo del arte, ejemplo de ello se cita un artículo titulado “Cuestiones de Arte: Valores Artísticos Larenses” escrito por Hermann Garmendia en El Impulso, en el cual hace referencia a un comentario de la Revista Nacional de Cultura en sus dos últimos números, que apunta “… como nota sobresaliente de su lírica cromática la tendencia a interpretar el arte como función socia.” (El Impulso, 25 de marzo de 1.940, Nº 11.487, p. 3). Y agrega Garmendia “Las figuras humanas de Orozco son implacables. Exhiben una miseria arrolladora en el fondo de un paisaje escuálido, sobrio de coqueterías cromáticas…”.

Dentro de esta línea de interpretación del arte como función social, destacamos las siguientes obras: “Los Hijos de Nadie” y “El Limpiabotas” en 1.938; en el año 1.954 pinta “Retrato de mi Hija” y la figura de Cristo “Getsemaní”, impresionante por su dramatismo. En este mismo orden, fundó en Carora una Escuela de Arte, donde le daría clases tanto a estudiantes humildes como adinerados. Dictó clases en el Colegio Federal de Barquisimeto en ausencia del artista Rafael Monasterios.

Luego viaja a Europa, especialmente a España, donde se relaciona con personalidades ligadas al arte y la cultura, como: Luis Alfredo López Méndez, José Rafael Pocaterra, Héctor Villalobos, Mario Briceño Iragorry, Rafael Arráiz y otros; visita numerosos museos.

Su loable trayectoria le hizo merecedor de numerosos Reconocimientos, Premios y Distinciones otorgadas por instituciones oficiales y privadas; su trabajo artístico producto de un esfuerzo constante y positivo le hace ser un ejemplo y un estímulo para los jóvenes de hoy y de ayer. Finalmente muere a la edad de 79 años, en Barquisimeto el 3 de octubre de 1994.

Fuente secundaria: Reseñas Biográficas de Larenses Ilustres (2005). Fundación Buria