Bio
 Un tema, las flores, es apenas un pretexto para que Diego Barboza nos acerque a dos importantes dimensiones de su trabajo. La primera de ellas se refiere al hecho mismo de pintar, acción que para el artista está primordialmente vinculada con lo propiamente pictórico, es decir, con el problema –o el gusto- de componer el cuadro. Esto, que pudiera parecer obvio, es un decisivo punto de partida para comprender el particular carácter de las obras que se hallan reunidas en esta exposición, en donde el tema de las flores tiene mucho del velado dramatismo que caracterizó a las vanitas.
Un tema, las flores, es apenas un pretexto para que Diego Barboza nos acerque a dos importantes dimensiones de su trabajo. La primera de ellas se refiere al hecho mismo de pintar, acción que para el artista está primordialmente vinculada con lo propiamente pictórico, es decir, con el problema –o el gusto- de componer el cuadro. Esto, que pudiera parecer obvio, es un decisivo punto de partida para comprender el particular carácter de las obras que se hallan reunidas en esta exposición, en donde el tema de las flores tiene mucho del velado dramatismo que caracterizó a las vanitas.
El espacio del cuadro sigue siendo uno de los problemas que obsesionan a Barboza, quien siempre busca desarticular la lógica del espacio real a partir del establecimiento de relaciones imposibles y absurdas entre los objetos representados y los planos pictóricos. Desde hace algunos años, sin embargo, este gesto casi picaresco viene sufriendo un vuelco dramático. Obras como Cayenas, Entre dos bosques o Selva interior, presentes en esta muestra, dan fe de ello.
La mayoría de estas composiciones enfrentan el “ligero realismo” de los elementos florales a un fondo casi indefinible de “vigas”, que desvincula el espacio “tranquilamente burgués” de la composición floral de un entorno reconocible. Estas vigas –que provienen de la representación que hace el artista del techo de su taller, hecho de láminas estriadas- se cruzan para conformar un entramado que sirve de fondo a la composición y, a su vez, actúa como una antesala al vacío, al negro. Barboza utiliza este espacio absurdo para acentuar la atmósfera inquietante y tensa del cuadro: en algunas obras, trae este fondo al primer plano, en otras, coloca elementos “flotantes”, no asentados en el espacio de la composición para destacar la irrealidad de lo representado.
Esto nos introduce en otra dimensión de la obra de Barboza: la nostalgia, el ámbito de los recuerdos y de la memoria. El pastel pareciera ser el material idóneo para estos trabajos, ya que el artista aplica los pigmentos con una intensidad inusual a la técnica, otorgando al cuadro una calidad aterciopelada y borrosa. Pero si bien este apego a imágenes del pasado ha sido constante en toda la producción de Diego, es interesante subrayar la tensión dramática que viene adquiriendo en sus últimos trabajos, gracias al tratamiento del espacio del cuadro, al uso del pastel, al oscurecimiento general de las tonalidades, y a la aplicación del negro como fondo que remite al vacío.
En el caso que nos ocupa, las flores y los otros objetos –cestos, figurillas, frutas- involucrados en la "composición”, cobran una carga significativa asociada más que a la memoria, a la hondura que conlleva la conciencia de la futililidad de la existencia.
 Las flores, en su delicada y frágil belleza, en su colorido inocente y pasajero, son quizás los elementos de la naturaleza que más adecuadamente nos permitan reflexionar sobre lo que ahora es y mañana no será, el paso del tiempo y lo que éste se lleva consigo, la realidad inexorable del nacer y del morir.
 Nace en Maracaibo, Estado Zulia, en Febrero de 1945
Exposiciones Individuales:
 1963 Centro de Bellas Artes, Maracaibo
 1964 Galería Pez Dorado, Caracas
 1965 Ateneo de Caracas
 1967 Ateneo de Caracas
 1970 The London Art News, Londres, GB
 1974 Galería BANAP
 1977 Galería Gaudí, Maracaibo
 1980 Centro de Bellas Artes, Maracaibo
 1980 Sala Mendoza, Caracas
 1986 Centro de Bellas Artes, Maracaibo
 1987 Centro de Arte Euroafricano, Caracas
 1990 Galería Tito Salas, Caracas
 1991 Centro de Arte Euroamericáno, Caracas
 1991 Museo de Bellas Artes, Caracas
 1991 Sala Banco de Maracaibo, Maracaibo
 1992 Sala Gobernación del D.F, Caracas
 1992 Ambrosino Gallery, Coral Gables, USA
 1993 Galería Uno, Caracas
 1994 Galería Félix, Caracas
 1994 Galería Namia Mondolfi, Caracas
 1995 Galería Odalys, Caracas
 1996 Galería Juan Ruiz, Maracaibo
 1996 Galería de Arte Moderno, Puerto La Cruz
 1997 Galería de Arte Nacional, Caracas
 1998 Galería Medicci, Caracas
 1999 Galería Medicci, Caracas
 2000 Museo de Arte Contemporáneo de Maracay - Mario Abreu
 2001 Museo de Arte Contemporáneo del Zulia
 2000 Galería de Arte Nacional
 2001 Galería Medicci
 
 Premios Obtenidos:
 1963 Premio Estimulo - IX Salón d’Empaire, Maracaibo
 1964 Premio José Ortín Rodríguez - X Salón d’Empaire, Maracaibo
 1965 Primer Premio de Dibujo - III Salón Pez Dorado, Caracas
 1968 Premio Enrique Otero V - XXIV Salón Oficial Anual de Arte Venezolano
 1973 Premio Emilio Boggio - XXXI Salón de Arte Arturo Michelena, Valencia
 1974 Premio Antonio E. Monsanto - XXXII Salón de Arte Arturo Michelena
 1985 Premio de Arte No Objetual - XLIII Salón de Arte Arturo Michelena
 1986 Premio Municipal de Artes Visuales - Consejo Municipal, Caracas.
 1997 Premio Nacional de Artes Plásticas – CONAC
Representado en:
 Galería de Arte Nacional, Caracas
 Museo de Bellas Artes, Caracas
 Museo de Arte Contemporáneo de Caracas Sofía Imber, Caracas
 Museo de Arte Contemporáneo del Zulia, Maracaibo
 Museo de Arte Contemporáneo de Maracay Mario Abreu
 Museo de Arte Moderno, Sao Paulo, Brasil
 Museo de Artes Gráficas, Maracaibo
 Centro de Bellas Artes, Maracaibo
 Banco Central de Venezuela
 Sala Mendoza, Caracas
 CONAC, Caracas
 Casa de Bolívar, La Habana, Cuba
 Centro de Enseñanza Gráfica, Caracas
 Universidad Simón Rodríguez, Caracas
 BANAP, Caracas
 Midland Group Gallery, Londres, GB
 Consejo Municipal, Maracaibo
 Consejo Municipal, Caracas
 Galería Municipal de Arte , Puerto La Cruz
 Centro de Arte Euroamericáno, Caracas
 Galería Namia Mondolfi, Caracas
 Galería Medicci, Caracas.
Fuente parcial / secundaria: Vereda (web)






 
										 
										

